Opciones muy simples y económicas que dejan de lado las preparaciones industrializadas. Para no resignar sabor.
Con la llegada del calor, hace falta tomar más líquidos y también mantener hidratados a los chicos.
Lo sabemos: no hay nada como el agua. Pero es cierto que a veces tenemos ganas de sumar sabor y las preparaciones industrializadas tienen colorantes, saborizantes y, en algunos casos, muchísima azúcar.
Las aguas saborizadas son fáciles de preparar.
La opción, entonces, son las aguas saborizadas caseras. Saludables y ricas, además son fáciles de hacer y muy económicas.
Acá, algunas combinaciones recomendadas.
Limón, pepino y menta
Es más suave que la limonada y súper refrescante.
Una combinación súper refrescante: imón, pepino y menta.
Preparación
Colocar en una jarra con agua potable, medio limón exprimido y medio limón cortado en rodajas finas. Agregar medio pepino con cáscara cortado en rodajas, cinco hojas de menta o hierbabuena machacadas y un poco de hielo. Colocar en la heladera una hora para que los sabores se intensifiquen.
Frutillas, limón y albahaca
Refrescante y con un sabor muy original.
Preparación
Colocar en una jarra con agua potable seis frutillas cortadas en láminas (si están en su punto justo serán bien sabrosas), un limón en rodajas, cinco hojas de albahaca machacadas para que liberen todo su sabor. Agregar hielo y llevar a la heladera.
Naranja, arándanos y jengibre
Preparación
Colocar en una jarra agua potable, una naranja para jugo cortada en rodajas, un puñado de arándanos cortados en mitades, dos láminas de jengibre fresco (para hacer más intenso su sabor, se puede rallar y agregar en el momento). Añadir hielo y dejar reposar en la heladera una hora.
Las frutas pueden combinarse a gusto.
Manzana verde y canela
Esta opción requiere de un paso más en la preparación, pero es ideal para los fanáticos de la canela.
Preparación
Colocar en una olla un litro de agua potable junto a una ramita de canela, calentar unos minutos para que la canela libere todo su sabor. Una vez que esté fría el agua, colocarla en una jarra junto a una manzana verde con cáscara, cortada en rodajas. Agregar hielo y dejar reposar.
Cualquiera de estas opciones puede endulzarse a gusto o consumirse así.
Desarrollado por Rodrigo Guidetti