El B-2 lanza bombas antibúnkeres sobre los depósitos de armas subterráneos de los hutíes, enviando un poderoso mensaje a todos los adversarios estadounidenses
En una demostración de fuerza de alto riesgo, Estados Unidos lanzó bombas antibúnkeres sobre depósitos de armas subterráneos en Yemen, la última señal de que la guerra de Gaza se está extendiendo a toda la región.
Este mes, varios medios de comunicación informaron que Estados Unidos desplegó bombarderos furtivos B-2 Spirit para atacar instalaciones subterráneas de almacenamiento de armas controladas por los rebeldes hutíes de Yemen respaldados por Irán, lo que marca el primer uso del bombardero por parte de Estados Unidos en la región.
Según se informa, los B-2 lanzaron bombas antibúnkeres GBU-57 Massive Ordnance Penetrator (MOP)/B sobre cinco búnkeres que albergaban armas utilizadas en ataques a buques en el Mar Rojo.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, describió el ataque como una demostración de la capacidad de Estados Unidos para atacar sitios profundamente enterrados y fortificados, y enfatizó que fue autorizado por el presidente estadounidense, Joe Biden, para degradar la capacidad de los hutíes.
Los hutíes, que han atacado más de 80 buques desde octubre de 2023, han intensificado sus ataques con misiles y drones en respuesta al conflicto de Gaza, incluidas acciones contra activos israelíes y estadounidenses.
El ataque también sirvió como advertencia indirecta a Irán, un aliado clave de los hutíes, dadas sus tensiones actuales con Israel y Estados Unidos. A pesar de la naturaleza sofisticada de la operación, no se reportaron víctimas civiles en el momento.
Aunque los detalles sobre la GBU-57 MOP/B siguen siendo clasificados, Global Security menciona que la munición es una poderosa bomba guiada con precisión que pesa casi 13.600 kilogramos y contiene más de 2.400 kilogramos de explosivos, diseñada para penetrar objetivos profundamente enterrados.
Global Security afirma que el sistema de navegación inercial (INS) asistido por GPS guía la bomba, que puede ser lanzada desde bombarderos B-52 y B-2 y puede atravesar 61 metros de hormigón reforzado de 34,5 megapascales (MPa) o 38 metros de roca moderadamente dura.
En cuanto a la naturaleza de los objetivos destruidos en el ataque, Ian Williams y Shaan Shaikh mencionan en un informe de Missile Threat de junio de 2020 que los rebeldes Houthi han desarrollado sofisticadas instalaciones subterráneas para ocultar y proteger sus lanzadores de misiles, haciéndolos más difíciles de detectar y destruir.
Williams y Shaikh señalan que estos sitios subterráneos se utilizan para almacenar y lanzar misiles balísticos, que se han empleado para atacar objetivos de Arabia Saudita e interrumpir el transporte marítimo en el Mar Rojo.
Afirman que los medios de comunicación hutíes muestran con frecuencia estos emplazamientos de misiles ocultos, destacando su capacidad para evadir la vigilancia aérea. Además, afirman que la táctica, combinada con el uso de drones para el reconocimiento, permite a los hutíes mantener una capacidad de misiles resistente a pesar de los ataques aéreos de la coalición dirigidos contra sus arsenales de misiles y puntos de lanzamiento.
Además, el uso de la guerra de túneles por parte de los hutíes plantea múltiples desafíos incluso para fuerzas tecnológicamente avanzadas como Estados Unidos.
En un artículo de agosto de 2023 publicado en la revista revisada por pares Studies in Conflict and Terrorism, Daphné Richemond-Barak y Stefan Voiculescu-Holvad mencionan que las redes de túneles socavan la guerra de precisión moderna a nivel estratégico. Dicen que destruir las redes de túneles requiere recursos masivos para la detección y neutralización, lo que a menudo resulta en grandes daños colaterales y un impacto limitado a largo plazo.
A pesar de esos desafíos, el uso por parte de Estados Unidos de aviones B-2 con bombas MOP en Yemen puede ser una muestra de su concepto de disuasión convencional.
En un artículo de 2018 para Strategic Studies Quarterly, Robert Haffa Jr. menciona que la disuasión convencional se centra en prevenir la agresión mediante el uso creíble de capacidades militares convencionales avanzadas, siendo los componentes esenciales de capacidad, credibilidad y comunicación cruciales.
Haffa Jr. sostiene que la disuasión convencional requiere fuerzas visibles, rápidas y decisivas respaldadas por tecnologías avanzadas como municiones de precisión, capacidades furtivas y cibernéticas, y tiene éxito haciendo que la agresión sea costosa e inútil.
En consonancia con el concepto de Haffa, los ataques B-2 con bombas MOP contra los hutíes demuestran la capacidad de Estados Unidos de realizar ataques de precisión de largo alcance contra objetivos fortificados, mostrando que los adversarios con defensas significativas aún son vulnerables al poder de fuego estadounidense.
Si bien las instalaciones nucleares ocultas de Irán han sido identificadas como objetivos potenciales de ataques estadounidenses o israelíes para destruir búnkeres, sus bases aéreas y de misiles subterráneas también podrían ser blanco de tales ataques.
En febrero de 2023, Asia Times informó sobre la inauguración por parte de Irán de la base aérea subterránea Oghab-44, lo que marca una mejora significativa de sus capacidades militares, en particular para los ataques marítimos de precisión en el Golfo Pérsico.
El Oghab-44, ubicado al noreste de Bandar Abbas, protege a las antiguas aeronaves iraníes anteriores a 1979, incluidos los F-4 Phantom, de ataques preventivos. Equipado con instalaciones críticas, respalda la estrategia asimétrica de Irán de antiacceso y denegación de área (A2/AD), lo que permite ataques sorpresa y represalias de precisión contra las fuerzas navales estadounidenses en el Golfo Pérsico.
Más allá de Medio Oriente, el uso por parte de Estados Unidos de bombarderos B-2 para lanzar bombas MOP también envía un mensaje claro a Corea del Norte y puede preocupar a China por su base de submarinos en Hainan, que da al Mar de China Meridional.
En un informe de dos partes de Beyond Parallel de 2024, Joseph Bermudez Jr y otros escritores mencionan que Corea del Norte continúa mejorando sus capacidades de misiles a través de su red de instalaciones subterráneas (UGF), que son cruciales para ocultar y proteger sus sistemas de misiles balísticos.
Bermúdez Jr. y otros destacan las obras en curso en la base de operaciones de misiles de Hoejung-ri, cerca de la frontera con China, que incluyen un nuevo edificio adyacente a una instalación de misiles subterránea. Señalan que esta base y otras como Goal y Kumchon-ni forman parte del cinturón de misiles estratégicos de Corea del Norte.
En un informe separado de Beyond Parallel de noviembre de 2018 , Bermúdez Jr. y otros escritores mencionan que Corea del Norte despliega sus misiles en tres ubicaciones del cinturón: estratégicas, operativas y tácticas, según su distancia de la Zona Desmilitarizada (DMZ).
El cinturón de misiles estratégicos de Corea del Norte se encuentra a más de 150 kilómetros al norte de la DMZ. Inicialmente estaba equipado con misiles Nodong y probablemente alberga misiles Hwasong más nuevos. El cinturón operativo se encuentra a 90-150 kilómetros al norte de la DMZ y está equipado con misiles balísticos Nodong de alcance medio o sistemas de mayor alcance.
Por último, el cinturón táctico, situado entre 50 y 90 kilómetros al norte de la DMZ, está equipado con misiles balísticos de corto alcance Scud (SRBM) y cubre instalaciones críticas en el norte de Corea del Sur.
En cuanto a China, CNN informó en agosto de 2020 que imágenes satelitales revelaron un submarino de ataque de propulsión nuclear (SSN) Tipo 093 chino ingresando a una base subterránea en la Base Naval Yulin de la Isla de Hainan.
CNN menciona que este raro avistamiento subraya el uso estratégico que hace China de instalaciones subterráneas para ocultar activos militares, mejorar la seguridad operativa y complicar la vigilancia del adversario.
Sin embargo, incluso un ataque convencional contra las fuerzas de misiles de Corea del Norte y el poder de disuasión nuclear submarino de China, a pesar de su política de “no ser el primero en utilizar armas nucleares”, aún podría provocar una respuesta nuclear de ambos potenciales adversarios de Estados Unidos.
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