El presidente leproso aseguró que hasta fin de año ambos continuarán, pero aseguró que "el club es más importante y los resultados son los que mandan"
Todo se complicó en Newell´s. La derrota con Sarmiento generó ruido en las tribunas, pero el eco rebotó en las paredes de las oficinas de la comisión directiva. Hace tiempo que los dirigentes están divididos respecto de la decisión a tomar sobre la continuidad de Heinze.
La caída del clásico fue un detonante como para poner sobre la mesa el debate de qué hacer con la conducción. Después llegaron los triunfos esperanzadores con San Lorenzo y Tigre y nuevamente el apoyo del presidente rojinegro, Ignacio Astore, volvió a recuperar peso dentro del círculo áulico del club.
La derrota ante Godoy Cruz y el empate con Platense desalentaron el ánimo rojinegro porque otra vez había que pelear para convencer a más de uno de que el camino era el correcto, que solo era cuestión de tiempo, algo que no se tiene nunca en el futbol, algo difícil de procesar. Pero, en esta parada, ratificando la apuesta por Gabriel Heinze estaba solo Ignacio Astore.
Sarmiento fue el límite para cambiar la forma de pensar del presidente rojinegro, porque consultado por Rosario3, el mandamás aseguró: "Sigo sosteniendo el apoyo porque sé lo que trabaja pero los resultados mandan, el fútbol es así".
El responsable de la Institución, por primera vez y presionado por los malos resultados, más el rendimiento pobre del equipo, agregó: "El club siempre, siempre va a estar más allá de los nombres, de las personas, de mí, de Heinze y por eso se evaluará a fin de año todo su trabajo".
A su vez, señaló "Para mí es innegociable el trabajo que realizaron como cuerpo técnico, pero también el de los jugadores, porque lo hicieron con esfuerzo. El técnico no depende del resultado con Boca para que se vaya porque para mí terminan el certamen, las dos fechas que restan y por supuesto después si evaluaremos".
El problema a esta altura no solo pasa por las decisiones que toma el DT sino también con la materia prima que tiene, con los jugadores de refuerzo que le trajo el manager, Pablo Guiázú, que por ahora no conformó a nadie y está en deuda con las expectativas que tal vez alguno se generó.
Sobre este tema, el responsable de la institución dio una mirada diferente a lo que venía manifestando hace tiempo, y fue contundente: "Con respecto a la gerencia deportiva, a fin de año la vamos a evaluar".
Faltan dos encuentros y puede ocurrir de todo en el Parque porque todavía hay chances de lograr objetivos internacionales, de salvar el año y de ser optimistas con el futuro. Lo que resta saber es si seguirán Gabriel Heinze y Pablo Guiñazú. Una fuente calificada aseguró: "Es un ciclo terminado para ambos" y todo parece indicar que en diciembre se terminarán los vínculos contractuales.
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