La ministra de Salud provincial, Sonia Martorano, sostuvo que puede estar relacionado con la “caída del trabajo formal” pero también con personas que cuentan con obra social y no están en condiciones de afrontar el pago de coseguros. Además, explicó que está “en trámite” la declaración de la emergencia pediátrica
En medio del incremento de las atenciones por enfermedades respiratorias vinculado al comienzo de los meses más fríos del año, desde el ministerio de Salud también manifestaron que aumentó la demanda de la población que acude al sector público de la provincia. La ministra Sonia Martonaro precisó que ronda “un 30 por ciento” y lo asoció a la crisis económica.
A la hora de analizar las razones, la titular de la cartera de salud santafesina explicó que “puede tener que ver con la caída del trabajo formal” pero también con que muchas personas que cuentan con obra social y en este momento no pueden afrontar el pago de los coseguros para las distintas consultas y estudios.
Pese al incremento de la demanda en efectores públicos, la funcionaria aclaró que el sistema está preparado para recibir a más personas y que se aumentó el número de camas en diferentes hospitales.
“Un ejemplo es el Centenario de Rosario, que está dando respuesta a la gran demanda”, dijo.
A su vez, expresó que “el 80 por ciento de la población” de Santa Fe está concentrado en 20 obras sociales de un total cercano a las 300.
“En eso se está trabajando cuando se habla de redefinir el sistema de salud, que es un sistema fragmentado desde lo financiero y geográfico”, explicó.
La semana pasada se conoció que el ministerio de Salud evalúa declarar la emergencia pediátrica por el faltante de especialistas para cubrir la demanda en el territorio provincial y este martes Martorano ratificó ese diagnóstico vinculado a un problema estructural de Argentina, que no afecta solo a Santa Fe.
El pedido ya fue presentado y se encuentra “en trámite” a la espera de la firma del gobernador Omar Perotti para que sea oficializado, una medida que en la práctica permitirá, según explicó la ministra, destrabar cuestiones burocráticas para el pago de horas extras a los pediatras.
El problema obedece a la distribución inequitativa de los especialistas en la provincia –están concentrados mayormente en Rosario y Santa Fe– pero también al aspecto de formación, debido a la poca cantidad de estudiantes de medicina que eligen la pediatría, en muchos casos por su baja rentabilidad.
“Hoy eligen las especialidades más rentables. Los pediatras están 40 minutos revisando a un niño, diciendo qué tipo de tratamiento tiene que hacer y esa consulta la cobrás en tres meses”, ejemplificó Martorano.
En la víspera del invierno, la ministra de Salud señaló que todavía no se alcanzó el pico de enfermedades respiratorias que elevará la demanda en el sector público y privado. Estima que se dará entre junio y julio.
“Hay un 80 por ciento de ocupación y tenemos camas, creemos que julio va a ser el mes más complicado”, anticipó.
Mencionó a la bronquiolitis, el rinovirus y el adenovirus como las afecciones más comunes de los pacientes, que en muchos casos son niños y niñas, y explicó que de manera preventiva incrementaron la cantidad de camas con monitores, respiradores y otra tecnología.
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