Como lo informó a fines de abril último el Ministerio de Interior de la Nación, que encabeza Eduardo “Wado” De Pedro, el Gobierno evalúo con la CNE el aumento “en un 30%” de la cantidad de establecimientos de votación, “con el objetivo de disminuir la concentración de personas y los riegos para autoridades de mesa”.
Además de eso, recomendó las medidas de protección clásicas de esta pandemia: “el uso de barbijos, la higiene de manos y el uso de alcohol en gel durante toda la jornada”, elementos que, según se indicó, serán distribuidos por el Poder Ejecutivo en todo el territorio nacional.
Según dijo a Chequeado el director de Comunicación del Ministerio de Interior, Luciano Peralta, y desde el área de Prensa de la CNE, el Gobierno nacional presentará en las próximas semanas un protocolo general para la realización de los comicios.
Desde la CNE, en particular, indicaron a este medio que entre las medidas se evalúa disponer “una puerta para entrar y otra para salir” de la escuela. En algunos países, como Bolivia, cuando las escuelas tenían solo un acceso se colocaron divisores para garantizar la circulación unidireccional de los votantes.
Además, “mostrar el DNI” a las autoridades de mesa -“en lugar de dárselo en la mano”-; “horarios para grupos de riesgo”; “distanciamiento” marcado; un “delegado sanitario”, que velará por el cumplimiento de las normas de protección contra la COVID-19; y “la vacunación para autoridades de mesa”.
Al respecto, el 10 de junio último, mediante la Acordada 62, la CNE expresó que “reiteraba” al Ministerio de Interior de la Nación “que se arbitren los medios para prever que, por quien corresponda, se incluya con anticipación suficiente en el cronograma de vacunación como personal estratégico esencial a todos los ciudadanos y ciudadanas que serán convocados como autoridades de mesa para las elecciones primarias y generales del corriente año”.
Seleccion de noticia Noemí Conde
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