La metodología agile se impone a la hora del rediseño organizacional.
."El liderazgo ágil es situacional y se basa en la delegación. Una cultura de retroalimentación que ayuda a cuestionarse siempre y a desarrollarse uno mismo y al entorno", dicen en Mercer.
El líder de la nueva organización debía encarnar un propósito con visión de futuro y transformar el negocio no sólo con la palabra sino también con la acción", dicen.
Seleccion de noticia NCG
Desarrollado por Rodrigo Guidetti