Rubén De Lorenzo, referente del sector, con respecto al crematorio señaló que en la ciudad hay dos hornos que “como máximo funcionan al 70%” por falta de mantenimiento. “Los dos realizan 8 cremaciones diarias, 10 a lo sumo. Pero el problema está cuando los trabajadores se declaran en asamblea y entonces no se trabaja”, sostuvo el empresario fúnebre.
“Hoy en día (los cuerpos) se están poniendo en depósitos, pero hay día que no tenemos depósito, por la falta de personal y de mantenimiento. El crematorio hay días que funciona y día que no, tenemos días que el personal está en asamblea permanente”, insistió.
Por último, desde la cámara de Servicios Fúnebres denunciaron que las áreas del cementerio están prácticamente olvidadas por el municipio y esto es lo que generó la situación que viven a diario.
“En El Salvador estuvimos como 15 días de asamblea y eso no nos permitía realizar traslados al crematorio que son los que generan nuevos espacios. En La Piedad no hay teléfono porque se robaron los cables, días atrás no había tinta para la impresora entonces tenían que realizar los boletos a mano, y anteriormente no había papel”, lamentó De Lorenzo.
Ante esta situación, desde el sector insistieron en la necesidad de que sus trabajadores sean incluídos dentro de las prioridades de vacunación
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