El equipo de Kudelka llega con un buen nivel, el ánimo en alza y la chance de ser líder. Es favorito frente a Gimnasia, que pierde seguido y tiene el peor promedio.
El presente de uno y otro contrasta. Newell's atraviesa un momento auspicioso, fortalecido por el primer triunfo de visitante, frente a Patronato. El estado anímico es el mejor para seguir incrementando el promedio y hasta subir a la punta, aunque sea algo momentáneo, en caso de un triunfo. Gimnasia es la contracara. No sale del fondo de la tabla tan temida, los traspiés son moneda corriente y ya no alcanza con la figura de Maradona para elevar el espíritu colectivo.
Newell's se afirma con el trancurso de las fechas. Marcha a paso seguro. Sabe resolver los partidos hasta cuando no tiene el mejor rendimiento o le faltan futbolistas determinantes, tales los casos de Jerónimo Cacciabue, quien sigue afuera tras resentirse luego de un desgarro, o Mauro Formica, que volvió unos minutos ante Patronato y hoy volverá a estar disponible.
Una de las virtudes del conjunto de Frank Kudelka es que propone todo el tiempo y es efectivo en el arco contrario. Encima en Paraná recuperó el poder de gol de sus delanteros. El DT ratificó ese día a Rodrigo Salinas y el ex Vélez le ratificó la confianza con la apertura del marcador. Y Lucas Albertengo volvió a festejar tras no hacerlo desde las dos primeras fechas.
Esa capacidad para el gol le permitió a la lepra convertir siempre en la Superliga. La excepción fue en el último encuentro de local, con Banfield (0-0). Hasta esa presentación, conseguía una victoria tras otra en el Coloso. Es de local donde construyó una campaña auspiciosa. Esta tarde la tarea será volver al triunfo en casa.
El fútbol tiene un condimento anímico importante y Newell's se encuentra bien al respecto. Hay confianza y los resultados ratifican que la forma de jugar es la correcta.
Newell's se consolida a partir de un fútbol ambicioso, más allá de que por momentos no encuentra la profundidad necesaria. Esto no opaca lo bueno que realiza.
No es posible decir lo mismo de Gimnasia. El efecto de Maradona modificó cuestiones puntuales en el rendimiento, pero la realidad es que el equipo pierde todo el tiempo. Apenas metió un triunfo con Godoy Cruz en Mendoza. El lobo intenta y llega, pero no la meta. En el mediocampo da ventajas en la contención. Allí está una de las llaves para que la lepra genere. Y abajo, el lobo comete errores.
Una de las últimas prácticas fue bastante floja. Cuentan que hubo bastante malestar porque las cosas no salieron. El ánimo se está deteriorando y el futuro pinta oscuro.
Newell's tiene la ocasión de un nuevo triunfo. Necesita paciencia y no desenfocarse ante el revuelo que genera la enorme figura de Maradona.
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